Ya no te creo, ya no te espero, ya no me importa de que quieras hablar, ya no te extraño, ya no te engaño; Mejor marcharse sin mirar hacia atrás, y si después de tanto peregrinar alguna vez nos volvemos a encontrar, mira mis ojos dime si alguna vez por un instante te dejé de adorar !
No hay comentarios:
Publicar un comentario